La incubación de huevos es un proceso importante para la cría de aves. En este artículo encontrarás todo lo que necesitas saber sobre la incubación de huevos, desde la preparación del huevo hasta el cuidado del polluelo.
La incubación de huevos es un proceso fundamental para la cría de aves. Es el paso previo a la eclosión y es esencial para garantizar la supervivencia de los polluelos. Este proceso puede ser llevado a cabo por las propias aves, en el caso de la avicultura doméstica, o por incubadoras, en la avicultura industrial. En este artículo te brindaremos información importante para llevar a cabo la incubación de huevos de manera exitosa.
Preparación del huevo para la incubación:
Antes de comenzar el proceso de incubación, es necesario asegurarse de que los huevos estén en buenas condiciones y sean adecuados para la incubación. Para esto, se deben seguir los siguientes pasos:Inspeccionar visualmente cada huevo para asegurarse de que estén limpios y sin roturas.
Descartar los huevos que presenten anomalías, como manchas, fisuras o deformidades.
Almacenar los huevos en un lugar fresco y oscuro, a una temperatura de 15 a 20 grados centígrados.
Proceso de incubación de huevos:
Una vez que se han seleccionado los huevos adecuados, el proceso de incubación puede comenzar. A continuación, te presentamos los pasos que debes seguir:Preparar la incubadora según las instrucciones del fabricante.
Ajustar la temperatura a 37,5 grados centígrados y la humedad a un 60%.
Colocar los huevos en la incubadora con la punta más afilada hacia abajo.
Voltear los huevos tres veces al día para asegurar un desarrollo uniforme del embrión.
Mantener la temperatura y la humedad constantes durante todo el proceso de incubación.
Controlar regularmente el desarrollo del embrión a través de una luz estroboscópica o una linterna.
Cuidado del polluelo después de la eclosión:
Una vez que los polluelos han eclosionado, es necesario brindarles cuidados especiales para garantizar su supervivencia. A continuación, te presentamos algunas recomendaciones importantes:No retirar los polluelos de la incubadora hasta que hayan secado completamente y estén activos.
Brindarles agua y alimento adecuados desde el primer día.
Mantener la temperatura en un rango de 32 a 35 grados centígrados durante los primeros días.
Gradualmente, ir disminuyendo la temperatura hasta alcanzar los 21 grados centígrados a los 21 días de edad.
Proporcionar un espacio adecuado para que los polluelos puedan crecer y desarrollarse.